El origen de
las sopas de ajo, es castellano y humilde, aunque con el paso del tiempo se han
acercado a mesas de más alta alcurnia, y se han enriquecido con taquitos de
buen jamón, chorizo y huevo entre otros ingredientes.
Pero
en su origen, calentaban el estómago a los labradores, a media mañana, para
retomar fuerzas y seguir con las duras tareas del campo.
Y
como se aproxima el otoño, en cuanto nos demos cuenta, nuestro estómago
agradecerá algo reconfortante y digestivo, que nos caliente el cuerpo y de
color a nuestras mejillas, como dice este hermoso refrán aragonés:
“ Siete virtudes tienen las
sopas
Quitan el hambre y dan sed
poca,
Hacen dormir y digerir,
Nunca enfadan y siempre
agradan
Y crían la cara colorada”
Pues
aquí os dejo mi versión de estas sopas, que son sencillas de preparar y muy
fáciles de tomar.
Se
pueden enriquecer con jamón, chorizo, o lo que guste el comensal.
Y
en cualquier caso, es un plato rico y económico, muy recomendable en esta época
que vivimos.
INGREDIENTES:
6
Ajos hermosos.
1
barra de pan del día anterior.
2
cucharadas de aceite de oliva
Huevos,
según los comensales, 1 por cabeza
1
cucharadita de pimentón de la vera.
1
Litro de agua, o si se prefiere caldo. Sal al gusto.
PREPARACIÓN:
Poner
una sartén al fuego con el aceite, para que se caliente.
Mientras
pelar los ajos y hacerlos rodajitas.
Poner
a hervir el agua.
Tostar
el pan, que habremos hecho rebanadas. Se puede tostar en la tostadora o en el
horno, hasta que tome color dorado.
Cuando
el aceite esté caliente, echar los ajos, moviendo a menudo para que no se
quemen, cuando tomen un bonito tono dorado, retirar la sartén del fuego y echar
la cucharadita de pimentón, mezclar bien y echar el agua hirviendo.
Poner
de nuevo al fuego, echar sal y mezclar.
A
continuación, echar las tostadas y dejar hacer unos 10 minutos a fuego medio,
para que se ablande el pan y tome el sabor de la sopa.
Podéis
añadir los huevos a los 5 minutos para que se hagan, o bien, hacerlos aparte y
añadir al final.
Yo
los he hecho en una bolsa de congelar, echando el huevo (sin cáscara) en la
bolsa con una gotita de aceite, cerrándola e introduciendo esta en un cazo con
agua hirviendo durante 2 o 3 minutos, se queda con la yema cruda y al romperle
da todo el sabor y color a la sopa.
En
cualquiera de los casos, espero que os guste.
¡¡¡SALUD Y DISFRUTAD!!!
Hola!!!!
ResponderEliminarCuando era pequeña escuchaba a mi abuela hablar una y otra vez de las sopas de ajo, pero no se porqué nunca me pregunte como se hacían, asique, tu receta me ha dado una gran alegría.......me la llevo para probarla en casa.
Besos.
Hola Pilar!!! Cuanto me alegro de que te sirva la receta, yo hasta hace poco no las había probado, era una receta que siempre preparaba mi madre a mi padre, y ahora que él no está, las he preparado y me le han recordado mucho.
EliminarAdemás sabiendo las numerosas propiedades del ajo, las hacen además de reconfortantes muy sanas!!
Besos!!!
Hola Nines!, las sopas de ajo me han traido muchos recuerdos, era la sopa que siempre preparaba mi madre para mi padre el día que no tenía tiempo de cocinar. Yo descubrí las maravillas de esta sopa ya de adulta, las hago muy parecidas a ti, con leves modificaciones. Para los días de mucho frio vienen genial ¿a que sí?. besos!
ResponderEliminarHola Chusa!!! Me pasa como a tí, me han servido para recordar tiempos pasados!!
ResponderEliminarAntes se las hacía mi madre a mi padre, y ahora se las preparo yo a ella!!!
Yo hasta hace muy poco no las comía, pero he de reconocer, que se preparan en un momento y atemperan el cuerpo, además están muy ricas!!!
Muchos besos;)
Hola Nines,
ResponderEliminarMuchas gracias por esta receta, me ha traído recuerdos de mi niñez cuando mi abuela nos la prepara para cenar y mi padre siempre decía que las hacía mejor mi abuela que mi madre (su hija) JJajajajjaja. En Aragón son muy típicas, y dependiendo de la localidad las hacen muy parecidas a las tuyas o se les añade caracoles blancos de monte(Moncayo) o jamón en el caso de Teruel. Excelente receta. Un besazo
Hola y muchas gracias por el comentario!!
EliminarCreó que a más de uno esta receta nos ha hecho mirar a nuestra niñez y viajar a ella por un momento:-)
Yo entonces ni las probaba, y recordando recetas familiares, las empecé a preparar y descubrí sus propiedades!!!
Muchos besos;)
Cuando era niña era una de esas cosas que aborrecía con toda el alma, pero como soy una inconstante ahora me gustan,jajaja. Yo tengo ganas de que llegue el frío para poder hincharme de sopas, me has dado ganas de unas sopitas de ajo que hace años que no como!
ResponderEliminarUn besito preciosa!
Hola Nuria!!! Como podemos llegar a cambiar de gustos, verdad?ja, ja...
ResponderEliminarEn algunos casos, como en el de estas sopas, no está mal hacerlo, se preparan en un pis-pas,están bien ricas, y nos traen recuerdos de la infancia, que de vez en cuando, no está
mal:-) como decía la canción "como hemos cambiado..."
Muchísimos besos guapa;)
Es uno de mis basicos de invierno una vez a la semana, me encanta!!
ResponderEliminarBesos
Me alegro que te guste esta receta, seguro que tienes una salud de hierro, je, je. Pero viendo las propiedades del ajo, espero que así sea!!
ResponderEliminarUn beso y gracias por la visita;)
Veramente gustosa e invitante, complimenti!!!!
ResponderEliminarGrazie mille Paola, è una ricetta di famiglia, molto antica, che riporta i ricordi di infanzia. un caldo abbraccio
ResponderEliminarHola guapísima!!!
ResponderEliminarTodavía hace calor por estos lares para cenar sopas, pero que sepas que ésta en especial me encanta. Y no la comí nunca de chinija, sino ya bien grande y en casa de unos amigos. Me pareció increíble que algo tan sencillo fuese tan exquisito.
Deseando estoy que refresquen las noches, para plantarme sopas por delante.
El refrán me lo llevo también :) que no lo había oído, pero es tan cierto como la vida.
Besotes, mi niña, buen finde.
Hola Nuria!!!! Qué alegría tan grande encontrarte de nuevo!!!
EliminarPor aquí también hace calor aún, y como tú yo también las he descubirto bien mayorcita, como a Mafalda, lo de las sopas hasta ahora no era lo mío, pero mira, vivir para ver, je, je
Los gustos cambian, y siempre está bien adquirir nuevas costumbres, que como la de comer sopa, es muy sana;)
Un besazo enorme!!!
Qué rica, a mi me encantan las sopas, bueno, me gustan mucho los platos de cuchara, en cuanto empiece el frío no faltan en casa. Un beso guapa, buen finde.
ResponderEliminarGracias Amparo!!! Me alegra que te gusten las sopas, porque además como dice el refrán, tienen muchas virtudes y además son sencillas y baratas, que no es poco estando como está el patio^-^
ResponderEliminarMuchos besitos y que tengas una estupenda semana!!!