QUICHÉ DE CALABACÍN Y BRÓCOLI

El estar a dieta no tiene porqué ser aburrido y monótono, comiendo siempre todo a la plancha o hervido.

Acabamos tan cansados de este tipo de platos, que en cuanto nos saltamos la dieta, se produce el famoso “Efecto Rebote”, que es justo lo que no queremos que ocurra.

Si preparamos platos ligeros y sanos, bajos en grasa, pero atractivos a la vista, comeremos mejor, nuestra nutrición será completa y no dejaremos la dieta antes de lo esperado.

Esta quiché que os presento, no tiene prácticamente grasa, queda atractiva a nuestra vista y rica para nuestro estómago.

Además nos aporta numerosas propiedades, que acompañan al brócoli y al calabacín.

Ambos son ricos en vitamina C, excelente para nuestras defensas, bajos en calorías y diuréticos por su alto contenido en agua.

Del brócoli son ya conocidas sus propiedades anti-cancerígenas y su alto contenido en hierro, excelente para combatir la anemia.

Si en lugar de nata, añadimos queso desnatado en crema, le estamos quitando grasas y calorías e incluso añadimos calcio a los anteriores beneficios.

INGREDIENTES:

1 plancha de masa quebrada (redonda)

1 pieza de brócoli

1 calabacín

1 cebolla

3 huevos

200 gr. de queso crema (en este caso desnatado)

100 gr. de jamón York

100 gr. de bacon

Aceite de oliva, sal, pimienta (opcional)

50 gr. de quesos variados para gratinar.

PREPARACIÓN:

Calentar el horno a 190ºC.

Disponer la masa quebrada en una fuente apta para el horno, cubrirla con papel de hornear y poner sobre toda la base, garbanzos secos o una fuente de medidas similares a la base, para introducir en el horno unos 12 minutos o hasta que veamos que comienza a dorarse. Este paso le da a la masa consistencia y una vez hecha la quiché, la masa seguirá crujiente. Quitar cuidadosamente los garbanzos que nos servirán para volver a hacer esta operación siempre que lo necesitemos.

Pelar y picar finamente la cebolla y ponerla en una sartén con 2 cucharadas de aceite de oliva y añadirle sal para que sude.

Cuando comience a estar transparente, añadir el calabacín en cuadraditos y el brócoli en trocitos pequeños. Tapar la sartén para que se haga al vapor y no pierda color.

En una sartén pequeña con una cucharadita de aceite, saltear el bacon y cuando esté hecho, eliminar la grasa que ha soltado con ayuda de un colador, reservar.

Picar el jamón york en cuadraditos.

Añadir el bacon y el jamón york a las verduras, mezclar y añadir un poco de pimienta blanca, si le queréis dar un toque más sabroso. Las comidas con un toque picante, ayudan a quemar las calorías y sacian más.

Batir el queso crema junto a los tres huevos, con un poco de sal.

Cuando veamos que las verduras están al dente, retirar del fuego. Dejar templar y posteriormente, distribuir sobre la masa quebrada, ya cocida. Añadir la mezcla de queso y huevos y espolvorear el queso para gratinar.

Introducir en el horno caliente, unos 25 minutos a 190ºC.

Sacar, dejar templar y …..

                             ¡¡¡¡¡  SALUD Y DISFRUTAD  !!!!!

Si la queréis dar brillo y un toque de sabor, antes de comerlo echar un chorrito de aceite de oliva virgen picante!!!!
(Podéis tener una aceitera con aceite, ajos y cayena que irá tomando el sabor, para cuando queráis aromatizar y dar sabor a una pizza, pan, etc).